Primero hay que atender las necesidades de la casa para luego asistir al vecino. Hacerlo a la inversa revela insensibilidad.
Casas derrumbadas por los sismos, en México. (Notimex) |
Mientras en la capital del país aún
se remueven los escombros de edificios derrumbados y en Oaxaca y Chiapas miles
de personas duermen a la intemperie y se enfrentan a un futuro incierto a causa
de los sismos del mes pasado, el canciller Luis Videgaray anunció el martes en
Nueva York que México enviará ayuda para la recuperación de Puerto Rico tras el
paso del huracán "María".
Para completar la metáfora del refrán
"candil de la calle y oscuridad en la casa", el secretario de
Relaciones Exteriores dijo que la asistencia a la isla caribeña será con técnicos
de la Comisión Federal de Electricidad para ayudar a restablecer la red
eléctrica que afectó el huracán. Muy bien, pero ¿y los cientos de oaxaqueños y
chiapanecos que sobreviven en penumbras en algunas áreas afectadas?
No se trata de regatear la ayuda a
otro país también golpeado por un fenómeno natural, pues es una forma de
corresponder a la solidaridad que otras naciones nos han demostrado, como
ocurrió el mes pasado en que varios grupos de rescatistas arribaron a México y
la recepción de toneladas de ayuda en especie y aportaciones en efectivo. Sin
embargo, nos parece que primero hay que atender las necesidades de la casa para
luego asistir al vecino. Hacerlo a la inversa revela insensibilidad hacia
quienes perdieron familiares, casa, empleo y casi hasta la esperanza.
Lo mismo sucede con los políticos
que han armado un circo con la cacareada ayuda que "generosamente"
darán al renunciar, como pretenden, a una parte de su financiamiento para
ayudar a la reconstrucción y a los afectados por los temblores de septiembre,
pues, además de que reaccionaron tarde, han tomado el tema como bandera porque
lo que realmente buscan es captar votos para el proceso del próximo año. A la
gente ya no la engañan.
Lo cierto es que quien ha dado
muestra de mayor sensibilidad en estos momentos de aflicción es el sector
empresarial, que ha ofrecido duplicar y hasta quintuplicar los apoyos que
reciben para socorrer a la gente, y el gremio artístico, que se ha organizado
mejor para canalizar la ayuda de forma más oportuna y eficaz hacia lo
prioritario: la construcción de viviendas. Y todo ello, atinadamente, sin la
intervención del gobierno.
Anexo"1"
Desaparecidos
Por cierto, luego del desafortunado
incidente de la supuesta niña Frida en la derrumbada escuela Enrique Rébsamen
de la Ciudad de México, los altos mandos de la Marina parece que volvieron a su
cuartel general, pues ya no se les ha visto informando de las labores de
rescate, si bien se ha dado paso a la remoción de escombros para entrar a la
etapa de reconstrucción de los inmuebles colapsados. Lo bueno es que no se ha
olvidado a los damnificados de Chiapas, Oaxaca y Morelos, hacia donde sigue
fluyendo la ayuda recaudada en todo el país, vía buques de la Armada y por
otros medios. Ahí hace falta de todo.