Por: Daniel A. Uicab Alonzo
No logro entender la existencia de los jóvenes que ni estudian ni trabajan, llamados "ninis". Somos de una generación forjada en la cultura del esfuerzo, en una época donde desde niños aprendimos la importancia del trabajo y valoramos el potencial del estudio. No pocas veces en la pobreza se abren buenas oportunidades.
Es fácil culpar a las instituciones de la falta de oportunidades para la juventud, pero cada cual debe buscar esas oportunidades, tocar puertas hasta encontrar lo que se busca. Hace unos días se dio a conocer que la UNAM rechazó a más de 60,000 aspirantes, y un investigador de la UAM aseguró que un buen contingente de ellos será parte de los llamados ninis.
Ceremonia de Graduación en el Centro de Capacitación de la Armada de México, en julio de 2012. (semar.gob,.mx) |
Pero hay una buena opción para estos muchachos que ni estudian ni trabajan: las escuelas militares. Muchos han encontrado en esos planteles del Ejército y la Armada una forma de vida, una carrera de éxito y futuro promisorio.
También quienes han concluido una carrera y no encuentran empleo pueden tener una oportunidad de labrarse un mejor porvenir formando parte de esos institutos en donde se ofrece una gama de carreras, oficios y especialidades.
Precisamente es en el Ejército y en la Marina donde mejor se puede ejemplificar esa cultura del esfuerzo, porque hay una vinculación estrecha entre educación continua y desarrollo profesional.
Aquí están los links para quienes deseen conocer más y no seguir formando parte de la legión de "ninis": http://www.sedena.gob.mx y http://semar.gob.mx.
NOTA: Publicado en mi columna Acaecimientos, en el periódico Milenio Novedades y en la página web SIPSE.com, el 25 de julio de 2012.